Cuando vas caminando y pensando en por qué las cosas suceden así, te preguntas por qué hacen algo si eso no es lo importante. Sientes que estás perdiendo el tiempo y no estás realizando lo que deberías. 

No sé si tú también sientes que caminas y piensas: "Lo que estoy haciendo no me está llenando".Las cosas ya no tienen valor; no sientes que eso sea importante. 

Sientes que debes actuar ya y hablar, porque hay algo que debemos hacer, que debemos despertar, porque las cosas se están poniendo feas.

 No por miedo, sino por la necesidad que ves en las personas, que necesitan de ese Dios que tocó y transformó tu vida. Sientes que necesitas hablar y mostrar que Jesús nos ama y nos apoya en todo momento. 

Que es nuestro motor ante todas las circunstancias que nos puedan pasar. Si sientes la necesidad de hablar y predicar más de Dios, no te calles; habla y alaba a Dios. 

No dejes que la depresión y la necesidad que sientes te silencien.

Las cosas se ponen complicadas, pero nosotros tenemos una vida que muchos están viviendo sin ella. Es momento de despertar y hacer su voluntad.

 No te desanimes; sigue orando y llevando su palabra. No es fácil seguir el camino de Dios, pero la verdad es que no hay otro camino que podamos tomar que no sea ese. Caminando con un propósito: el propósito de Dios.