Robert Nesta Marley Booker, (Bob Marley) es el intérprete de música reggae más conocido y respetado. Ganándose el apodo de "El rey del reggae". Pero también, a Bob se le asume el hecho de haber difundido el movimiento rastafari, de donde el era miembro. Pero algo que muy pocos saben es que él , se convirtió al cristianismo antes de su muerte.
Bob Marley tuvo muchos hijos (Damian Marley, Ziggy Marley, Stephen Marley, Ky-Mani Marley, Rohan Marley, Julian Marley, Cedella Marley, Isaac Marley, Stephanie Marley, Imani Carole Marley, Sharon Marley, Robbie Marley, Karen Marley, Makeda Marley, Nahum Marley); todos estos con diferentes mujeres, aunque solamente se casó con Rita Marley.
Como todos los seres humanos Bob Marley no fue un gran ejemplo en la vida familiar. Sin embargo, aunque Bob Marley no fue un padre de familia ejemplar, predicó la paz en el mundo y especialmente, en su violenta país Jamaica.
En 1966 el emperador etíope Haile Selasie se dio cuenta de que en Jamaica los rastafari le veneraban como si fuera Dios encarnado. Esto le preocupaba a Selasie envió misioneros para que deshicieran este gran malentendido. Selasie creía que si él enviaba personalmente a alguien para que comenzará una iglesia en la que se adoraba a Cristo y no a él mismo, los rastafaris seguirían al Cristo verdadero.
Durante casi toda su vida, El rey del reggae fue un devoto de la doctrina rastafari. Pero el arzobispo Abuna Yesehaq, de la Iglesia Ortodoxa Etíope, hizo amistades con Bob Marley. Fue esa amistad la que condujo a su bautismo siete meses antes de su muerte.
“Cuando Él se bautizó, se abrazó con su familia y lloró; todos lloraron juntos durante media hora”, explica el arzobispo Yesehaq a la revista Jamaica´s Sunday Gleaner, en 1984.
La conversión de Bob Marley al cristianismo fue criticada fuertemente por muchos rastas. Muchos consideraron una traición el hecho de aceptar a Jesucristo como único y verdadero Salvador.
Su conversión está bien documentada en Jamaica en la entrevista de Yesehaq con Ian Boyne en JBC. En esta entrevista se discute en gran detalle la aceptación de Jesús en la vida de Marley como único Señor y Salvador.
A pesar de que Bob estaba muriendo de cáncer de cerebro, continuó con sus compromisos artísticos, haciendo giras y presentaciones. Marley claramente oraba al cantar, no actuaba. Esto se puede escuchar en sus obras como "One Love", "Forever Loving Jah" (Estaremos siempre amando a Jah. Jah es Yavé), "My hand was made strong / By the 'and of the Almighty" (Mi mano fue fortalecida / por la mano del Todopoderoso), entre otras bellas canciones, que más bien eran alabanzas a Dios.
"Bob no era una estrella de rock mundana. Probablemente es más adecuado decir que era un músico religioso que había triunfado en el mundo secular", escribió Christopher Stefanick, director del Ministerio para Jóvenes de la archidiócesis de Denver.
Stefanick añadió: "“Los rastas creen que el cannabis (cáñamo o marihuana) elimina las barreras mentales para lograr un pensamiento iluminado, y basan su peinado en la ley del Antiguo Testamento, Sin embargo, aunque estas doctrinas sean cuestionables, está claro que una fe sincera en Dios y en el servicio a su gente fueron las fuerzas que condujeron la vida y música de Bob”.
“Muchos rastas le consideraban un profeta, y yo, como líder de la Iglesia en Jamaica, vi que era un profeta por derecho propio. Su música estaba inspirada por Dios. Era una expresión de su creencia en que Dios estaba con él. Inspiró a muchos a entrar a la iglesia, incluso hoy. Hace cinco meses bauticé un sacerdote rasta con sus grandes trenzas que entró en la iglesia con su esposa”, afirma Lloyd Malakot.
La muerte del legendario Bob Marley fue dolorosa. Se marchó el 11 de mayo de 1981, a la edad de 36 años. En sus últimos momentos su viuda le escuchaba pedirle al Señor "Jesús, llévame"…
Ya al borde de la muerte le dijo a su hijo Ziggy Marley: "El dinero no puede comprar la vida"...
"He visto muchas camisetas que muestran la cara sonriente de Bob con una hoja de marihuana a su lado. Me gustaría crear una camiseta de la cara de Bob junto a una cruz", escribe Stefanick.