En estos tiempos se ha propagado el término "ninis" para referirse a personas que ni estudian ni trabajan. Este término también se ha aplicado a muchos cristianos que ni oran ni leen la Biblia. Pero si no leemos ni oramos, ¿cómo podemos decir que somos verdaderos cristianos? Es como un cantante que no tiene buena voz ni sabe nada de música, no se le puede llamar músico.
La Biblia nos enseña que a los tibios los vomitará Dios, por lo que debemos tener cuidado de no caer en este tipo de persona. Para dejar de ser "ninis" debemos primero asegurarnos de que somos verdaderos hijos de Dios. Si no sentimos la necesidad de alimentarnos de su Palabra y estar en comunión con Él, podemos orar y pedirle perdón por habernos alejado de Él. Podemos decirle que reconocemos que somos pecadores, que Él es nuestro salvador, que murió por nosotros y que lo recibimos como nuestro salvador. Le pedimos que nos ayude y ordene nuestra vida para que ya no seamos "ninis" cristianos, sino hijos de Dios comprometidos con Él.
Espero que estas palabras te hagan reflexionar y te acerquen más a Dios. Recuerda que la oración y la lectura de la Palabra son esenciales para nuestra vida cristiana. ¡Deja de ser un "nini" y conviértete en un verdadero hijo de Dios!