Es sorprendente que algunos que se identifican como cristianos no escuchan música cristiana y en cambio prefieren música secular, argumentando que algunas canciones no dicen nada malo y que incluso hablan de amor. Sin embargo, la música secular está hecha para el mundo, con el único propósito de hacer dinero y fama, y a menudo presenta mensajes que van en contra de los principios bíblicos. Escuchar música que ofende a Dios no es coherente con el deseo de ser un seguidor fiel de Cristo.
Algunos dicen que la música cristiana es aburrida porque solo habla de Dios, pero eso es porque no han entendido el propósito de la música cristiana. La música cristiana está hecha para Dios y para glorificarlo. Si tienes a Cristo en tu corazón, la música que es para él no te parecerá aburrida. Sigue a Cristo, aplica todos los versículos bíblicos y no solo los que te convienen. Si eres luz en medio de las tinieblas, no deberías andar en lugares que desagradan a Dios ni escuchar música que ofende su nombre. Recuerda, "Dios sin nosotros sigue siendo Dios, pero nosotros sin Dios no somos nada". (1 Corintios 2:9)
En resumen, la música cristiana es una forma de alabanza a Dios que abarca una variedad de géneros musicales. Es importante escuchar música que honre a Dios y no ofenda su nombre. Si tienes a Cristo en tu corazón, la música que es para él no te parecerá aburrida y te edificará. Recuerda seguir a Cristo y aplicar todos los principios bíblicos en tu vida.