Lo que siento por ti es algo muy profundo, y la palabra "amor" se queda corta para describirlo. Tú siempre has estado conmigo, incluso antes de que yo existiera en el mundo. Siempre pensaste en mí y me amaste, incluso cuando fui mentiroso o me comporté mal. Cuando me llevaste la contraria y me pediste que hiciera algo que yo no quería, cuando me ha dado flojera leer la Biblia, tú siempre me has bendecido. Cuando yo me alejé y no quería saber nada de nadie, tú me mostraste tu amor y tu misión hacia mí. Cuando te fallé, te falté al respeto o no di buen testimonio, tú siempre me amaste, me bendeciste y me educaste como un buen padre. Soy tu hijo amado y aunque te falle, siempre me levantas y me das fuerzas para seguir adelante. Todo lo que me sucede, ya sea bueno o malo, es permitido por ti porque eres todopoderoso y sabes lo que es mejor para mí. Tú eres mi primer amor y siempre lo serás.
Versículo adicional:
"Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna." - Juan 3:16 (NVI)